Estudio: en 2022 se desecharán más de 5.000 millones de teléfonos inteligentes, una columna de unos 50.000 kilómetros de altura, o 1/8 de la distancia a la luna
En el Día Internacional de los Residuos Electrónicos, la organización sin ánimo de lucro WEEE (Waste from Electrical and Electronic Equipment) Forum publicó un interesante informe sobre los residuos electrónicos de este año y del futuro.
Esto es lo que sabemos
Basándose en las estadísticas de ventas mundiales, los analistas de WEEE han previsto que 5.300 millones de teléfonos inteligentes se convertirán en residuos electrónicos este año. Se trata de teléfonos viejos que ya no se utilizan, que se guardan en cajones, armarios, garajes o se tiran a los cubos de basura como si fueran basura normal. Si consideramos que el grosor medio de un smartphone es de 9 mm, estos residuos formarían una pila de casi 50.000 kilómetros de altura. Es también 1/8 de la distancia entre la Tierra y la Luna.
Mientras tanto, el reciclaje podría permitir extraer de los aparatos componentes valiosos como el oro, la plata, el cobre, el paladio y diversas piezas para luego fabricar nuevos smartphones con ellos. Las empresas fabricantes intentan reciclar, pero sus esfuerzos no son suficientes: Samsung, por ejemplo, recicló el año pasado solo el 0,0019% de los teléfonos que vendió desde 2015.
En la actualidad, hay un total de unos 16.000 millones de teléfonos en todo el mundo. Pero solo en Europa, casi uno de cada tres dispositivos lleva mucho tiempo sin utilizarse y no hace más que acumular polvo. La WEEE predice que para 2030 se enviarán a los vertederos unos 74 millones de toneladas de aparatos electrónicos y electrónicos cada año, desde lavadoras y tostadoras hasta tabletas y dispositivos del sistema de posicionamiento global (GPS).
Fuente: Digital Trends
