La NASA ha descubierto el objeto espacial M82 X-2 que desafía las leyes de la física: una estrella de neutrones 10 millones de veces más brillante que el Sol.

Por: Maksim Panasovskyi | 20.04.2023, 21:01
La NASA ha descubierto el objeto espacial M82 X-2 que desafía las leyes de la física: una estrella de neutrones 10 millones de veces más brillante que el Sol.

La Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) ha encontrado un objeto en el Universo 10 millones de veces más brillante que el Sol. Se trata de una estrella de neutrones llamada M82 X-2.

Esto es lo que sabemos

Según los científicos, la estrella de neutrones viola una ley física conocida como límite de Eddington. En términos sencillos, define la luminosidad máxima de un objeto en función de su masa. Si la potencia de los rayos X supera este límite, el objeto (en nuestro caso una estrella de neutrones) debe explotar.

Los científicos conocen desde hace tiempo las fuentes de rayos X ultrabrillantes. Suelen ser entre 100 y 500 veces superiores al límite de Eddington, pero los astrofísicos siguen sin encontrar una explicación. Anteriormente, se había sugerido que su elevado brillo no era más que una ilusión óptica, pero un nuevo estudio de la NASA ha demostrado que tales objetos existen en nuestro Universo.

Hipótesis anteriores habían sugerido que los agujeros negros eran la fuente de la potente emisión. En el caso de M82 X-2, se trata de una estrella de neutrones con una gravedad superficial 100 billones de veces superior a la de la Tierra. Por ello, la materia libera una enorme cantidad de energía al caer sobre la superficie de la estrella. Por ejemplo, el efecto de la caída de un malvavisco sería comparable a la explosión de miles de bombas de hidrógeno.

Junto a M82 X-2 hay otra estrella. Nuestro héroe absorbe cada año la masa equivalente a 1,5 Tierras. Los científicos de la NASA creen que la estrella de neutrones está experimentando procesos que le permiten violar el límite de Eddington y no explotar. Es posible que un fuerte campo magnético sea el culpable.

Fuente: Live Science