Los cazas de quinta generación F-35 Lightning II mejorados podrían sufrir importantes retrasos debido a un grado de paralelismo poco realista, la falta de recursos para las pruebas y las limitaciones de mano de obra.

Lockheed Martin dijo la semana pasada que las entregas del F-35 con el paquete Technology Refresh 3 (TR-3) no se reanudarán hasta el segundo trimestre de 2024. Pero ese no es el único problema de los cazas de quinta generación.

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El F-35 Lightning II podría sufrir importantes retrasos por tres razones. En primer lugar, las Fuerzas Aéreas estadounidenses sufren escasez de mano de obra. También faltan recursos para las pruebas. Además, el avión de quinta generación adolece de un nivel de paralelismo poco realista.

El paralelismo se refiere a una situación en la que las adquisiciones tienen lugar durante la fase de desarrollo. Las Fuerzas Aéreas estadounidenses han sufrido mucho por este motivo, por lo que ahora intentan hacer todo lo posible para evitar que esto ocurra con el bombardero estratégico B-21 Raider y los cazas de sexta generación.

Las entregas del F-35 Lightning II se han retrasado debido a la recepción tardía del equipo, a un retraso en el desarrollo del software y a un comienzo tardío de las pruebas de vuelo. Además, hay poca gente trabajando en el proyecto. El teniente general de las Fuerzas Aéreas Michael J. Schmidt declaró que.

El TR-3 aporta un procesador de mayor rendimiento. Se trata de una actualización crítica antes de la modernización del Bloque 4. Añadirá unas 80 capacidades diferentes, la mayoría de las cuales se mantienen en secreto.

Fuente: Revista Air & Space Forces