Mercurio ha sufrido una explosión masiva de plasma solar, posiblemente causante de "auroras de rayos X"
Mercurio ha sufrido recientemente una enorme explosión de plasma solar procedente de la oculta cara posterior del Sol. Esta explosión probablemente causó auroras invisibles de rayos X alrededor de la superficie rocosa del planeta. La explosión fue tan potente que superó en 40 veces el tamaño de la Tierra. Esta explosión fue provocada por una potente llamarada solar que se produjo alrededor de las 19:00 horas ET del 9 de marzo.
La explosión, que el Observatorio de Dinámica Solar de la NASA asegura que cubrió unos 500.000 km de diámetro, probablemente dejó tras de sí un enorme "desfiladero de fuego" en la superficie del Sol y provocó una gran eyección de masa coronal (CME), una nube de plasma magnetizado y radiación de rápido movimiento que colisionó con Mercurio el 10 de marzo. Mercurio suele verse afectado por las CME debido a su proximidad a nuestra estrella. Debido a este bombardeo, el pequeño planeta carece de atmósfera y está completamente expuesto a toda la fuerza de estas tormentas solares.
Uno de los mayores problemas durante el máximo solar es que los investigadores no pueden vigilar adecuadamente la parte posterior del Sol, que puede ocultar manchas solares gigantes que causan tormentas solares inesperadas como la que golpeó Mercurio el otro día. Es posible que estas manchas solares giren hacia la Tierra a medida que el Sol gira, exponiendo a nuestro planeta a llamaradas y eyecciones de masa coronal.
Fuente: Spaceweather, Espacio