Apple ha presentado un recurso de 916 páginas contra la prohibición de venta del Apple Watch con funciones de detección de oxígeno en sangre
No había duda de que Apple desafiaría la decisión de prohibir las ventas de los relojes inteligentes Apple Watch Series 9 y Ultra 2 con medición del nivel de oxígeno en sangre en Estados Unidos. Y eso es exactamente lo que ha ocurrido.
Para los que no están al tanto
A finales del año pasado, la Comisión de Comercio Internacional de EE.UU. (ITC) dictaminó prohibir la importación de determinados relojes Apple Watch a EE.UU.. La ITC determinó que Apple había infringido las patentes de Masimo relacionadas con el funcionamiento del sensor de medición de SpO2. La prohibición afectaba a los nuevos modelos Apple Watch Series 9 y Apple Watch Ultra 2.
Como consecuencia, la empresa tuvo que preparar modelos de reloj modificados sin pulsioxímetro para eludir la prohibición. Apple, por supuesto, no está de acuerdo en la infracción de patentes y tiene la intención de probar su caso en los tribunales.
Esto es lo que sabemos
El otro día Apple presentó una apelación, y se preparó para ello muy seriamente: el documento contiene un total de 916 páginas. Se trata de un resumen de 68 páginas, más de 300 páginas de descripción de la decisión de la ITC recurrida, cientos de páginas de la Oficina de Patentes y mucho más.
Lo más importante de este documento es, como argumenta Apple, que Masimo no sólo no era conocida principalmente por sus pulsioxímetros clínicos, sino que ni siquiera tenía un reloj inteligente real en el momento en que se presentó la demanda. Masimo se presentó ante la ITC en 2021, y su smartwatch W1 no salió hasta 2022. Masimo sólo proporcionó al tribunal dibujos CAD como prueba.
Esencialmente, Apple está tratando de argumentar que no había un caso real -ni reloj ni productos- en el momento en que se presentó la denuncia ante la ITC y, por lo tanto, la prohibición debería levantarse.
A Apple también le preocupa que otras empresas que no tienen productos reales, pero sí creatividad y software, puedan seguir el ejemplo y demandar a los fabricantes. Por cierto, ya hay casos de este tipo. Otra empresa médica, AliveCor, pidió a la ITC que prohibiera el Apple Watch porque Apple supuestamente infringía la tecnología ECG de AliveCor.
Fuente: The Verge