Francia revela accidentalmente datos clasificados sobre submarinos a través de una aplicación de footing

Submarinistas franceses revelaron accidentalmente información sobre las patrullas de submarinos nucleares con misiles balísticos a través de la aplicación de seguimiento de carreras Strava.
Esto es lo que sabemos
Gracias a los datos que los marineros publicaron abiertamente en la app, los usuarios pudieron conocer el funcionamiento de la base de la isla Ile Longue, en el oeste de Francia, y el horario de servicio de los barcos. El caso es que las tripulaciones de los submarinos nucleares franceses compartieron públicamente sus actividades deportivas a través de la app Strava, revelando sin querer información confidencial sobre el horario de patrulla de los SSBN.
De este modo, se hacía pública la información de una de las bases más secretas de la Marina francesa en la isla de Ile Longue, situada en el puerto de Brest (Finisterre).

Submarino de propulsión nuclear Le Triomphant. Ilustración: Seaforces
Esta base, situada en el puerto de Brest, alberga cuatro SSBN, equipados cada uno con dieciséis misiles nucleares, mil veces más potentes que la bomba lanzada sobre Hiroshima.
Desde 1972, estos barcos patrullan constantemente para estar preparados para lanzar un ataque nuclear si así lo ordena el presidente francés. La seguridad de la base está garantizada por numerosas patrullas, vehículos aéreos no tripulados y modernos sistemas de control, incluidos escáneres y reconocimiento facial. Los teléfonos móviles están prohibidos en el territorio, pero ni siquiera estas medidas han impedido la filtración de información confidencial.
Las rutas publicadas por los submarinistas permitieron determinar la ubicación de los barcos y su horario de servicio. Cabe señalar aquí que la misma situación ha ocurrido antes con los estadounidenses. En una ocasión se utilizó Strava para ayudar a identificar las bases estadounidenses en Siria. Después de eso, EE.UU. prohibió a los militares el uso de la función de geolocalización en las zonas de operaciones.
Fuente: Le Monde