Škoda se une al proyecto SATURNIN: una segunda vida para los residuos de acero

Škoda Auto se convirtió en participante del proyecto SATURNIN, cuyo objetivo es reutilizar los residuos de acero y apoyar la descarbonización de la industria. La esencia de la iniciativa es el intercambio de datos sobre residuos metálicos entre fabricantes para que puedan reutilizarlos. De este modo, se reduce la necesidad de reciclar el acero en las fábricas, que consume mucha energía, en consonancia con los principios de la economía circular.
La medida está en consonancia con Next Level - Škoda Strategy 2030, en virtud de la cual la empresa planea que todas sus plantas de la República Checa y la India sean neutras en carbono para finales de la década.
Así funciona
Cuando se fabrican carrocerías, quedan importantes secciones de chapa que pueden reutilizarse. Se trata, por ejemplo, de partes del techo de coches con techos solares panorámicos o paneles laterales. El proyecto SATURNIN, dirigido por la empresa checa Beneva, recoge información sobre esos residuos y la distribuye a los fabricantes de componentes más pequeños. De este modo, los residuos se convierten en material valioso, se reducen las emisiones de CO₂ y se recortan los costes energéticos.




Škoda participa en este proceso abasteciéndose de los restos de metal de modelos como el Octavia, el Karoq, el Kodiaq y el Enyaq, y también busca formas de reutilizar otros componentes en cooperación con los proveedores.
Otras iniciativas ecológicas
Škoda tiene un largo historial de introducción de iniciativas medioambientales. Ya en 2013, la empresa puso en marcha el programa GreenFuture, que abarca tres áreas:
- GreenProduct - creación de vehículos respetuosos con el medio ambiente, con un consumo mínimo de energía y alta reciclabilidad.
- GreenFactory: eficiencia de los recursos en la producción
- GreenRetail: respeto por el medio ambiente en concesionarios y estaciones de servicio.
La empresa ya ha conseguido una producción neutra en carbono en la planta de Vrchlab, y a partir de 2020 habrá eliminado por completo el vertido de residuos en todas sus plantas.
Curiosamente, el reciclaje de materiales en Škoda no se limita al metal. Por ejemplo, como parte del proyecto Curiosity Fuel lanzado el año pasado, la empresa utiliza cáscaras de granos de café para curtir el cuero de los asientos de los coches.
Fuente: Škoda