El Comité Rumano Antimonopolio ha iniciado una investigación sobre las infracciones de la competencia cometidas por Sony Interactive Entertainment
Mientras Microsoft lucha por el derecho a adquirir Activision Blizzard por segundo año consecutivo, podría estar gestándose una nueva batalla legal de alto nivel en la industria de los juegos. Esta vez contra el principal rival de Microsoft, que ha estado paralizando la conclusión del acuerdo entre los dos gigantes estadounidenses: la compañía japonesa Sony.
Esto es lo que sabemos
El Consejo Rumano de la Competencia (Consiliul Concurenței România) ha anunciado el inicio de una investigación sobre posibles violaciones de las normas de competencia por parte de Sony Interactive Entertainment.
Según las autoridades rumanas, el principal motivo del procedimiento es el hecho de que las versiones digitales de los juegos para consolas PlayStation sólo pueden adquirirse en PlayStation Store.
Según el Consejo Rumano de la Competencia, este monopolio no permite bajar los precios porque los distribuidores terceros no tienen acceso a los juegos de Sony. En consecuencia, los consumidores no tienen alternativas de compra, lo que da a la empresa japonesa un control total sobre los precios.
Esto plantea una pregunta legítima: ¿por qué el Consejo Rumano de la Competencia no hace las mismas reclamaciones contra Microsoft, Apple, Google, Epic y Nintendo, ya que ellos también son monopolistas de sus productos y servicios?
Sí, los funcionarios rumanos señalan en el documento que es PlayStation la que posee el 80% del mercado de videoconsolas en Rumanía, pero ¿es esta la verdadera razón para acusar a Sony de violar la política de competencia?
Fuente: Comunicado de prensa del Consejo Rumano de la Competencia